El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, ha expresado una profunda preocupación ante la creciente colaboración militar entre Corea del Norte y Rusia. En una llamada telefónica con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, Yoon afirmó que el envío de tropas norcoreanas a Ucrania para apoyar a Rusia representa una grave amenaza para la seguridad global y un desafío al orden internacional basado en reglas.

Ante esta situación, Seúl ha anunciado que coordinará con la OTAN "medidas de respuesta" que se implementarán de manera gradual, dependiendo del nivel de cooperación entre Pyongyang y Moscú. Yoon subrayó la importancia de una respuesta internacional unificada para contrarrestar esta alianza cada vez más estrecha.

La decisión de Corea del Norte de enviar tropas a Ucrania ha sido confirmada por los servicios de inteligencia surcoreanos, que estiman que un total de 12.000 soldados podrían ser desplegados en el frente. Esta noticia ha generado una fuerte condena internacional y ha puesto de manifiesto la creciente preocupación por la inestabilidad en la región del Indo-Pacífico y sus implicaciones para la seguridad global.

Tanto Corea del Sur como la OTAN han enfatizado la estrecha conexión entre la seguridad euroatlántica y la del Indo-Pacífico. Ambos líderes han acordado mantener una estrecha vigilancia sobre los desarrollos relacionados con la cooperación entre Rusia y Corea del Norte y compartir información de inteligencia para coordinar sus respuestas.

La decisión de Seúl de coordinar con la OTAN marca un nuevo capítulo en la cooperación entre ambas organizaciones y demuestra la creciente importancia de una respuesta multilateral ante los desafíos globales. Sin embargo, aún queda por ver qué medidas concretas adoptarán Corea del Sur y sus aliados para hacer frente a esta nueva amenaza.