En un vuelo a bordo del Air Force One el pasado 3 de abril, el expresidente de Estados Unidos Donald Trump presentó la “Gold Card”, una nueva visa especial que, a diferencia de la tradicional Green Card, ofrecería a ciertos extranjeros una vía directa a la ciudadanía estadounidense. La tarjeta, que tendrá la imagen de Trump y la inscripción “The Trump Card”, estará dirigida a personas con alto poder adquisitivo, especialmente inversionistas internacionales.
Trump reveló el diseño de la tarjeta durante una interacción con los medios de comunicación, y explicó que el precio de la Gold Card será de cinco millones de dólares. A diferencia de la Green Card, que otorga permiso para vivir y trabajar en EE.UU., la Gold Card está pensada como un acceso más directo a la ciudadanía, beneficiando a quienes contribuyan significativamente a la economía del país mediante inversiones, pago de impuestos y creación de empleos.
“Permitiremos que las personas más exitosas y generadoras de empleo de todo el mundo adquieran una vía hacia la ciudadanía estadounidense”, señaló Trump en un discurso previo en el Congreso. Además, destacó que la Gold Card estará disponible en un plazo de menos de dos semanas y aseguró ser “el primer comprador”.
El exmandatario ha explicado que esta propuesta está dirigida a “ciudadanos globales” con visión empresarial, quienes buscan establecerse en EE.UU. para aprovechar sus oportunidades económicas. Howard Lutnick, secretario de Comercio, destacó que hay 250,000 personas esperando para adquirir la tarjeta, la cual estaría dirigida principalmente a individuos con un interés en establecerse por razones económicas o de inversión.
Aunque esta propuesta ha sido recibida con diversas opiniones, Trump la presentó como una versión más sofisticada de la Green Card, que permitiría un acceso mucho más ágil a la ciudadanía estadounidense para quienes ya están establecidos con una capacidad económica notable.
Además de la Gold Card, Trump ha planteado otras propuestas migratorias, como la “Green Card automática” para estudiantes extranjeros que se gradúen de universidades en EE.UU. En junio de 2024, el exmandatario sugirió que los graduados universitarios deberían recibir automáticamente una Green Card como parte de su diploma, para evitar que estudiantes talentosos regresen a sus países de origen, dejando de contribuir al desarrollo económico de EE.UU.
Hasta el momento, ninguna de estas propuestas ha sido formalizada ni convertida en ley. Sin embargo, la Gold Card se mantiene como una de las propuestas clave de Trump durante su campaña para un segundo periodo presidencial.
