La conversación sobre cómo se desempeñarían las estrellas actuales de la NBA en otras épocas del baloncesto no para de generar controversia. Esta vez, un comentario encendió las redes y los programas deportivos: Stephen Curry, considerado por muchos el mejor tirador de la historia, no habría promediado ni 17 puntos por partido si hubiera jugado en la década de los 80 o 90, según afirmó un exjugador y miembro del Salón de la Fama.

La revelación fue hecha por el comentarista Stephen A. Smith en el programa First Take de ESPN. Smith contó que durante una charla privada, una leyenda del baloncesto —cuyo nombre no reveló— le dijo sin rodeos: “Steph Curry no habría pasado de 17 puntos por juego”, argumentando que en esos años el nivel de contacto físico era demasiado alto y que el tipo de juego habría perjudicado al base de los Golden State Warriors.

El exjugador no puso en duda el talento de Curry, sino su resistencia física en un entorno mucho más agresivo. “Lo habríamos lastimado”, afirmó, sugiriendo que en su época los árbitros no protegían tanto a los jugadores como hoy, y que incluso las lesiones de tobillo que Curry sufrió al inicio de su carrera habrían sido un blanco recurrente para los defensores.

“Lo habríamos hecho tropezar, lo habríamos sacado del partido”, dijo, subrayando que el físico y la rudeza marcaban el baloncesto de aquellos tiempos.

No es secreto que la NBA ha evolucionado: las reglas actuales favorecen el juego ofensivo y castigan el contacto, permitiendo a jugadores como Curry brillar desde la línea de tres sin la amenaza constante de ser derribados. Smith, sin embargo, también reconoció que el nivel técnico y físico actual es más alto gracias a mejores entrenamientos, nutrición y tecnología.

“El nivel de habilidad de ahora es superior, eso es obvio”, comentó. Aun así, muchos veteranos sienten que las figuras de hoy no valoran suficientemente el esfuerzo y la dureza de su época.

Según Smith, lo que muchos exjugadores quieren es un poco de reconocimiento. “Si Curry dijera: ‘Qué bueno que no jugué en esa época, me habrían destrozado’, todo se calmaría”, bromeó. Pero mientras eso no ocurra, la conversación seguirá encendida.

La discusión sobre si los jugadores de antes sobrevivirían al ritmo actual o si los de ahora aguantarían el juego físico del pasado sigue siendo una de las favoritas de los fans y analistas. Lo cierto es que Steph Curry ya dejó su huella, revolucionó la forma en la que se juega el baloncesto y, sin importar la época, su impacto es innegable.