Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, generó controversia al declarar que México y Canadá deberían convertirse en estados estadounidenses si su país sigue otorgándoles "subsidios significativos". Las declaraciones se dieron en el programa *Meet the Press* de NBC News, donde Trump expresó su descontento con las relaciones comerciales actuales.
En la entrevista, Trump afirmó que EE. UU. está "subvencionando a Canadá con más de 100 mil millones de dólares al año y a México con casi 300 mil millones de dólares". Según él, estas cifras justifican su sugerencia de anexar a ambos países como estados de la Unión Americana.
"Si vamos a subvencionarlos, que se conviertan en un estado de Estados Unidos", declaró, reiterando su postura de buscar un "campo de juego nivelado" en las relaciones comerciales internacionales. Además, reafirmó su apoyo a los aranceles, calificándolos como "hermosos" para equilibrar la balanza económica.
Ante estas declaraciones, Claudia Sheinbaum, presidenta de México, respondió enérgicamente durante una conferencia de prensa, defendiendo la soberanía nacional.
"Obviamente, México es un país libre, soberano e independiente. Eso lo sabemos todos y así siempre lo tenemos que defender", señaló.
La mandataria explicó que los supuestos "subsidios" mencionados por Trump se deben al incremento de las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos, superando las importaciones.
Sheinbaum también destacó la importancia del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para fortalecer la competitividad de la región. "La única manera de competir con otras regiones del mundo es mantener y fortalecer el T-MEC. Más que vernos como competencia, hay que vernos como un complemento", añadió.
La presidenta recordó que el propio Donald Trump firmó el T-MEC durante su primer mandato, resaltando los beneficios que el acuerdo ha traído a Estados Unidos. "Ya habrá momento para hablar de estos beneficios", concluyó, sin entrar en mayores confrontaciones.
Las declaraciones de Trump han encendido el debate sobre el futuro de la relación entre los tres países de América del Norte, marcando un posible inicio tenso en su próximo mandato presidencial. Mientras tanto, Sheinbaum dejó claro que México continuará defendiendo su soberanía y fortaleciendo su posición en el marco del T-MEC.