En respuesta al anuncio del Kremlin sobre una tregua de 30 horas por la celebración de la Pascua ortodoxa, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, propuso extender el alto al fuego a 30 días completos, con el objetivo de dar una oportunidad real a la paz y medir las intenciones verdaderas de Moscú.
“Si se mantiene una tregua completa, Ucrania propone ampliarla más allá del día de Pascua, el 20 de abril”, escribió Zelenski en su cuenta oficial de X (antes Twitter). “Treinta horas son suficientes para dar titulares, pero no para crear confianza de forma genuina. Treinta días darían una oportunidad a la paz”, añadió.
La propuesta llega luego de que el presidente ruso, Vladímir Putin, anunciara un cese de operaciones militares entre las 15:00 GMT del sábado y la medianoche del domingo al lunes, con base en “consideraciones humanitarias”. Sin embargo, Zelenski denunció que, al momento del anuncio, las tropas rusas continuaban con ataques y fuego de artillería, según reportes del Comandante en Jefe ucraniano, Oleksandr Sirski.
Zelenski indicó que esperaba nueva información del frente durante la noche para verificar si efectivamente Rusia ha cesado los ataques, lo cual permitiría una respuesta positiva de Ucrania en la línea de un cese mutuo de hostilidades.
Esta propuesta coincide con la postura previamente expresada por Ucrania y respaldada por Estados Unidos, que planteaba un alto al fuego temporal completo de 30 días, rechazado por el Kremlin hace más de un mes.
En paralelo al cruce de propuestas de tregua, el sábado fue escenario de un intercambio masivo de prisioneros de guerra, facilitado por los Emiratos Árabes Unidos. El Ministerio de Defensa ruso informó el retorno de 246 soldados rusos y 15 prisioneros heridos, mientras que Ucrania logró recuperar a 277 prisioneros de guerra, según el propio Zelenski.
Desde el inicio del conflicto, Ucrania ha recuperado a más de 4,500 militares y civiles en distintos canjes con Rusia. Zelenski ha insistido en que la liberación de todos los cautivos es un paso clave para avanzar hacia negociaciones serias que pongan fin a la guerra.
Los recientes gestos —aunque aún limitados— se producen también bajo presión internacional, luego de que el expresidente estadounidense Donald Trump advirtiera que podría retirarse de su papel como mediador si no se veían avances concretos en el proceso diplomático en cuestión de días.