Hombre lleva más de 15 días atrapado en un Escape Room en España

Hombre lleva más de 15 días atrapado en un Escape Room en España

Un hecho insólito ha captado la atención de medios y redes sociales en España: un hombre lleva más de 15 días encerrado en un Escape Room sin lograr resolver los acertijos que le permitirían salir. La historia, que parece sacada de una comedia absurda, ha escalado a niveles inesperados, con noticieros transmitiendo en vivo desde el lugar y la Guardia Civil interviniendo… sin poder hacer mucho.

Desde una pequeña ventana del establecimiento, el hombre —visiblemente exhausto pero aún con algo de humor— ofreció declaraciones a los medios. “Yo buscaba un reto difícil, pero yo qué sé… 4 o 5 horas, no más. ¡Llevo 15 días aquí y no me dan ni agua!”, exclamó.

El participante asegura que el juego contiene un error, ya que, según él, solo le falta encontrar una llave para completar el reto, pero esta no aparece. “He mirado por todo… ¡100 veces! La llave no está, que de verdad, ¡la llave no está!”, insistió, frustrado.

La Guardia Civil acudió al lugar tras la presión pública, pero al revisar el contrato que firmó el hombre antes de ingresar, descubrieron una cláusula que estipula que el participante no puede abandonar el juego hasta completarlo. Este detalle legal impidió su liberación inmediata, dejando el caso en un limbo jurídico inédito.

A pesar de su situación, el hombre no ha perdido completamente el sentido del humor. “Lo único bueno es que me salvé de comer con mi suegra, pero estoy triste porque ya empezó La Liga y me la estoy perdiendo”, bromeó frente a las cámaras.

El caso ha desatado una ola de reacciones en redes sociales: desde quienes lo apoyan y exigen su liberación, hasta quienes lo toman como inspiración para memes y bromas virales. También ha reabierto el debate sobre la necesidad de regular este tipo de experiencias extremas, que, aunque pensadas como entretenimiento, podrían rozar los límites del bienestar físico y mental de los participantes.

Mientras tanto, el hombre sigue dentro… buscando una llave que, según él, nunca estuvo ahí.



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