El Ministerio de Exteriores de China hizo un llamado a que la inteligencia artificial (IA) sea un recurso compartido por toda la humanidad, en lugar de convertirse en un privilegio exclusivo de las naciones más ricas. Durante una conferencia de prensa, el portavoz Guo Jiakun advirtió que las recientes restricciones impuestas por Estados Unidos a la exportación de chips avanzados y modelos de IA podrían generar barreras que dificulten el desarrollo en países en vías de crecimiento, incluyendo China.

“El desarrollo de la inteligencia artificial debe fomentar la cooperación global y no provocar exclusiones que limiten el bienestar compartido”, subrayó Guo. El vocero también expresó que estas políticas van en contra de los intereses comunes de la humanidad y podrían dividir aún más a las naciones en un momento en que la colaboración es crucial.

El lunes, el Departamento de Comercio de Estados Unidos anunció nuevas normativas que restringen la exportación de tecnologías avanzadas, argumentando preocupaciones de seguridad nacional. Estas medidas buscan evitar el uso de la IA y los chips en actividades que podrían representar riesgos, como el desarrollo de armas químicas o ciberataques. 

Aunque las restricciones están dirigidas a países considerados una amenaza para los intereses estadounidenses, los aliados y socios que cumplan con ciertos requisitos podrán acceder a estas tecnologías bajo excepciones específicas.
  
El llamado de China se produce en medio de crecientes preocupaciones de la comunidad internacional sobre cómo estas restricciones podrían afectar la cooperación tecnológica y la equidad global. Sectores académicos y empresariales advierten sobre el riesgo de una nueva Guerra Fría tecnológica, que no solo frenaría el desarrollo global, sino que también ampliaría las brechas entre países desarrollados y en vías de desarrollo.

Mientras Estados Unidos justifica sus restricciones como una medida de seguridad, la postura de China resalta la importancia de un enfoque inclusivo y colaborativo. “Crear obstáculos al desarrollo tecnológico perjudica tanto a los países en desarrollo como al progreso global”, enfatizó Guo.

El conflicto entre seguridad nacional y acceso equitativo a la tecnología pone en evidencia los desafíos del avance tecnológico en un mundo interconectado. Este debate no solo define las dinámicas entre las potencias mundiales, sino también el rumbo del desarrollo tecnológico en beneficio de la humanidad.