Al menos 10 personas resultaron heridas en un tiroteo masivo ocurrido la noche del 1 de enero en las inmediaciones del club nocturno Amazura, ubicado en el barrio neoyorquino de Queens, según informó el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD).
El tiroteo se desató poco antes de las 23:20 horas, inicialmente dentro del establecimiento, según informes de la aplicación de seguridad Citizen, y se extendió a las calles cercanas, dejando más víctimas. Tres personas fueron ingresadas al hospital Jamaica tras el incidente. Ninguna se encuentra en estado crítico, y se espera que todas sobrevivan, de acuerdo con las autoridades.
El NYPD informó que dos vehículos, un BMW blanco y un Infiniti Q50 gris, podrían estar relacionados con el ataque. Los agentes trabajan en su localización como parte de la investigación.
Según el medio local *AMNY*, el tiroteo ocurrió durante una fiesta privada en honor a un pandillero local fallecido en octubre pasado, cuyo cumpleaños coincidía con el día de Año Nuevo. Unas 80 personas esperaban afuera del club Amazura cuando al menos dos hombres se acercaron y comenzaron a disparar indiscriminadamente contra la multitud.
Este trágico evento no fue el único incidente violento registrado el 1 de enero en Estados Unidos. En Nueva Orleans, un hombre identificado como Shamsud-Din Bahar Jabbar embistió a una multitud que celebraba el Año Nuevo en el barrio francés, causando la muerte de 15 personas y dejando a 30 heridas. Horas después, en Las Vegas, una camioneta Tesla explotó frente al Trump Hotel, generando alarma pero sin reportes iniciales de víctimas.
El ataque en Queens ha generado preocupación entre los residentes del barrio, que demandan un incremento en las medidas de seguridad. Mientras tanto, las autoridades trabajan para esclarecer el motivo detrás del tiroteo y garantizar que los responsables sean llevados ante la justicia.
Este inicio de año recuerda la urgencia de reforzar la seguridad en eventos públicos y combatir los factores que alimentan la violencia armada en las comunidades.