La gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, expresó su preocupación por los nuevos aranceles impuestos por Donald Trump a México y Canadá, advirtiendo que representan una amenaza económica para el estado. A través de su cuenta en X, Hobbs señaló que la medida encarecerá los alimentos, la gasolina y la vivienda, además de afectar a sectores estratégicos como la manufactura de semiconductores, la agricultura y la energía limpia.

En una carta pública, Hobbs indicó que se unió a líderes empresariales y agrícolas para alertar sobre los efectos negativos de estos aranceles.

“Estos aranceles son un impuesto para las familias y los negocios de Arizona, que amenaza con descarrilar nuestro progreso. Estos nuevos impuestos pondrán en riesgo los precios de los alimentos y la gasolina. También incrementarán el costo de la vivienda y pondrán en peligro industrias críticas de Arizona que emplean a decenas de miles de personas (…). Espero que el presidente reconsidere esta acción apresurada, que podría tener un impacto devastador en la economía de nuestro estado”, escribió la gobernadora.

Hobbs también destacó que los aranceles podrían provocar alteraciones en las cadenas de suministro, afectando el comercio con México y Canadá, dos socios clave para Arizona.

El estado mantiene una fuerte relación comercial con México, su principal socio comercial, con un intercambio anual de casi 20 mil millones de dólares. Expertos advierten que cualquier aumento en los costos de importación y exportación afectará tanto a consumidores como a productores locales.

La carta de Hobbs se suma a las críticas de otros sectores en contra de la política comercial de Trump, quien ha defendido los aranceles como una estrategia para fortalecer la economía de EE.UU. Sin embargo, en estados fronterizos como Arizona, la medida genera inquietud por su posible impacto en el comercio y el empleo.