Este lunes, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, afirmó que el Rancho Izaguirre, localizado en Teuchitlán, Jalisco, operaba como un centro de adiestramiento del Cártel Nuevo Generación (CNG), pero descartó que fuera un campo de exterminio, como denunciaron colectivos de búsqueda de desaparecidos.
“No hay un indicio de que el predio haya sido un campo de exterminio, como lo mencionaron (los activistas), sino un centro de adiestramiento”, señaló el funcionario durante La Mañanera del Pueblo, la conferencia matutina de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
García Harfuch explicó que en el rancho se encontraron una pista de entrenamiento y objetos relacionados con el reclutamiento de nuevos integrantes del grupo delictivo.
“Hay una serie de cosas y hemos confirmado que ese y otro punto, que también fue asegurado, eran lugares para adiestrar a sujetos que querían enlistarse en la organización delictiva”, detalló.
A pesar de los hallazgos de ropa y 400 pares de zapatos en el lugar, hasta el momento la Fiscalía General de la República (FGR) no ha confirmado el hallazgo de restos humanos en el inmueble.
Por su parte, la Presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que su gobierno garantizará transparencia en la investigación y que se revelará la verdad de los hechos.
“No la verdad construida por alguien, sino la verdad”, subrayó Sheinbaum.
La mandataria recordó que la Fiscalía del Estado de Jalisco es la institución que actualmente tiene en custodia el predio y lidera las indagatorias.
“Todos, madres, padres y familiares de personas desaparecidas, el Gobierno de la República, tenemos que tener la certeza de ese lugar. Tiene que salir la verdad, porque el pueblo de México tiene que saber la verdad”, enfatizó.
El hallazgo del rancho ocurre en un contexto de crisis de desapariciones en el país, donde más de 120 mil personas han sido reportadas como no localizadas desde la década de 1960, según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas.
Ante esta situación, Sheinbaum anunció que presentará reformas para mejorar la respuesta gubernamental, fortaleciendo la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) y creando una base única de información forense y una plataforma federal de identificación humana.
La controversia en torno al Rancho Izaguirre continúa, mientras familiares de desaparecidos y colectivos ciudadanos exigen más respuestas y una investigación a fondo sobre lo que realmente ocurrió en el predio.