El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este martes 3 de junio la implementación de nuevos aranceles del 50% sobre casi todas las importaciones de acero y aluminio, que entrarán en vigor a partir del miércoles 4 de junio de 2025. La medida, formalizada mediante una proclama presidencial, busca reforzar la industria nacional y proteger la seguridad del país frente a lo que la administración Trump considera prácticas comerciales desleales por parte de competidores extranjeros.
Actualmente, ambos metales están gravados con un arancel del 25%, tasa vigente desde el 12 de marzo, cuando se eliminaron las exenciones previamente otorgadas. La nueva política duplica este porcentaje, intensificando las restricciones comerciales.
Una excepción parcial será el Reino Unido, cuyas exportaciones seguirán enfrentando un arancel del 25%, en el marco de un acuerdo bilateral firmado el pasado 8 de mayo. Sin embargo, la proclama advierte que este trato podría revisarse a partir del 9 de julio si se considera que el país británico no cumple con los términos establecidos.
Anuncio frente a trabajadores siderúrgicos
El presidente Trump presentó esta decisión de forma pública el viernes pasado, durante una visita a la planta Mon Valley Works–Irvin de U.S. Steel, en Pensilvania. Ahí sostuvo un encuentro con trabajadores del sector, donde destacó una nueva asociación entre U.S. Steel y la japonesa Nippon Steel como un modelo a seguir. “Estos aranceles protegerán aún más la industria del acero en Estados Unidos”, afirmó durante su discurso.
Efecto en la economía: alza de precios y posible guerra comercial
Aunque la medida ha sido aplaudida por sindicatos y sectores industriales estadounidenses, economistas advierten que duplicar los aranceles podría tener un efecto dominó en la economía, encareciendo productos que contienen o dependen del acero y el aluminio, como automóviles, electrodomésticos, materiales de construcción y hasta latas de alimentos.
Además, alertan que el incremento en los costos de producción podría trasladarse al consumidor final, elevando los precios de bienes básicos y afectando cadenas de suministro. Incluso industrias que no utilizan directamente estos metales, como el comercio minorista, podrían verse afectadas por el aumento en costos logísticos.
Riesgos internacionales: la UE prepara represalias
A nivel global, la decisión podría desatar nuevas tensiones comerciales. La Unión Europea ya había pospuesto represalias contra los aranceles iniciales impuestos a principios de año, pero ahora advierte que prepara una lista de contramedidas si no se llega a un acuerdo antes del 14 de julio. Expertos alertan sobre el riesgo de una guerra comercial que afecte múltiples sectores productivos internacionales.
El mercado ya responde
Desde que Trump asumió la presidencia en enero de 2025, el precio del acero en EE. UU. ha subido un 16%, alcanzando los 984 dólares por tonelada métrica, comparado con 690 dólares en Europa y 392 dólares en China, según datos del Departamento de Comercio. Este aumento refleja no solo las nuevas medidas, sino también la incertidumbre sobre el rumbo comercial de EE. UU. en los próximos meses.