Cada 1 de octubre se celebra el Día Internacional del Café, una fecha dedicada a rendir homenaje a una de las bebidas más consumidas en todo el mundo. La iniciativa, promovida por la Organización Internacional del Café (OIC) desde 2015, busca no solo destacar la importancia del café en la vida cotidiana, sino también visibilizar las dificultades que enfrentan los productores y fomentar prácticas sostenibles en su cultivo.

El café es conocido por sus efectos estimulantes, ayudando a las personas a mantenerse alertas y concentradas. Además, numerosos estudios han señalado sus beneficios para la salud, lo que ha contribuido a su creciente popularidad global.

A nivel mundial, la producción de café alcanza los 168 millones de sacos al año, según datos de la OIC. En América Latina, Brasil se mantiene como el principal productor, seguido por Colombia. México, por su parte, también ocupa un lugar destacado gracias a sus exportaciones de cafés de especialidad, con Chiapas, Veracruz, Puebla, Oaxaca y Guerrero como los principales estados cafetaleros.

La especie más consumida a nivel global es la Arábica, reconocida por su cultivo en altitudes de entre 1200 y 1700 metros sobre el nivel del mar, donde las condiciones climáticas favorecen su óptimo desarrollo.

Este Día Internacional del Café es una oportunidad no solo para disfrutar de una buena taza, sino también para reflexionar sobre la importancia de apoyar una industria que enfrenta grandes retos, pero que continúa siendo esencial en muchas partes del mundo.