Con el inicio oficial de la temporada de huracanes 2025 en el océano Pacífico desde el 15 de mayo, y su próximo arranque en el Atlántico el 1 de junio, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha recordado que estos fenómenos climáticos se mantendrán activos hasta el 30 de noviembre. Pero una pregunta común entre la población es: ¿por qué se les asigna un nombre a los huracanes?
La respuesta tiene un objetivo clave: mejorar la comunicación y la preparación ante emergencias. De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el uso de nombres cortos y distintivos para identificar huracanes facilita la difusión de información clara, precisa y rápida a la población y medios de comunicación.
De coordenadas a nombres
Antes del sistema actual, los ciclones se identificaban por sus coordenadas geográficas (latitud y longitud), lo que resultaba confuso y poco práctico. Para resolver este problema, a mediados del siglo XX se comenzó a nombrarlos con nombres femeninos. Más tarde, en 1979, se incorporaron también nombres masculinos, alternando ambos géneros de manera equitativa.
Un sistema organizado
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos, parte de la NOAA, fue el primero en adoptar en 1953 un sistema de listas alfabéticas para los ciclones del Atlántico Norte, asignando a cada tormenta el siguiente nombre en la lista. Este modelo sigue vigente y es utilizado por múltiples organismos meteorológicos en todo el mundo.
La OMM ha establecido que este proceso debe ser supervisado por cinco comités regionales de ciclones tropicales, entre ellos el Comité de Huracanes de la Región IV, al que pertenece México. Estos grupos se reúnen regularmente para revisar, aprobar y actualizar las listas de nombres, que son propuestas por los Servicios Meteorológicos Nacionales de cada país miembro.
¿Cómo se eligen los nombres?
Los nombres seleccionados deben ser familiares para las personas de cada región, fáciles de pronunciar y recordar, y deben evitarse aquellos que ya hayan estado asociados con huracanes particularmente destructivos, los cuales se retiran de las listas por respeto a las víctimas.
Este sistema, que prioriza la claridad y prevención, ha demostrado ser fundamental para salvar vidas al reducir la confusión durante emergencias y facilitar la planificación de evacuaciones o alertas tempranas.
Con la temporada de huracanes 2025 en curso, las autoridades recomiendan mantenerse informados a través de los canales oficiales de Conagua y Protección Civil, así como prepararse ante cualquier contingencia climática que pueda surgir en los próximos meses.
