El presidente ruso Vladimir Putin ha definido públicamente las condiciones que considera indispensables para poner fin al conflicto armado con Ucrania, en un momento de creciente presión internacional por alcanzar un alto al fuego. Según informaron este miércoles tres fuentes rusas con conocimiento directo de las negociaciones, el mandatario exige garantías escritas de que la OTAN no continuará su expansión hacia el este, así como un levantamiento parcial de las sanciones impuestas a Rusia desde el inicio de la invasión en febrero de 2022.
“Putin está dispuesto a hacer la paz, pero no a cualquier precio”, señaló una fuente de alto nivel cercana al Kremlin a la agencia Reuters. Las exigencias rusas incluyen también que Ucrania mantenga un estatus neutral, que se resuelva el bloqueo de activos rusos en el extranjero y que se implementen mecanismos de protección para los ciudadanos rusoparlantes dentro de territorio ucraniano.
La propuesta llega mientras se confirma que Moscú ha solicitado a Kiev celebrar una segunda ronda de negociaciones de paz el próximo 2 de junio en Estambul, dando continuidad a un primer encuentro realizado el 16 de mayo. El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, expresó confianza en que “todos aquellos que sinceramente desean la paz respalden este esfuerzo”.
Lavrov confirmó que Rusia ya redactó un memorándum oficial con su postura sobre las causas del conflicto y las condiciones para una salida negociada. Ucrania, por su parte, también habría entregado su versión del documento, aunque ha criticado públicamente la demora del Kremlin en presentar su propuesta.
Exigencias claves del Kremlin
Entre los puntos centrales del memorándum ruso se incluyen:
• Compromisos escritos de que la OTAN no se expandirá hacia el este.
• Renuncia de Ucrania a integrarse en la Alianza Atlántica.
• Suspensión del suministro de armamento occidental a Kiev.
• Levantamiento parcial de sanciones y desbloqueo de activos rusos.
• Reconocimiento implícito del control ruso sobre Crimea y zonas ocupadas en el este.
Además, el Kremlin insiste en la necesidad de que el nuevo acuerdo incluya protecciones específicas para la población rusoparlante en Ucrania, una demanda histórica de Moscú que Kiev ha calificado como excusa para justificar la ocupación.
Tensiones con Trump y Occidente
La propuesta rusa fue presentada después de una llamada entre Putin y Donald Trump el pasado 19 de mayo. El presidente estadounidense manifestó su frustración por la falta de avances y advirtió que si Moscú continúa con los ataques sin negociar de buena fe, se impondrán nuevas sanciones. En declaraciones recientes, Trump incluso acusó a Putin de haberse “vuelto completamente loco” tras un bombardeo masivo en territorio ucraniano.
Si bien en el pasado Trump ha sido criticado por su cercanía con el líder ruso, su tono se ha endurecido, reflejando el creciente malestar internacional ante la prolongación del conflicto.
Ucrania mantiene su postura
El gobierno del presidente Volodymyr Zelensky no ha emitido una respuesta oficial al último anuncio ruso, pero ha reiterado en diversas ocasiones que no permitirá que Moscú dicte su política exterior ni que impida su aspiración de ingresar en la OTAN. Desde Bruselas, la alianza atlántica ha reafirmado que su política de puertas abiertas no está sujeta a negociaciones con potencias externas.
