El gobierno del presidente Donald Trump presentó este lunes una nueva aplicación móvil denominada CBP Home, diseñada para permitir que los inmigrantes en situación irregular en Estados Unidos se “autodeporten” sin enfrentar el proceso de arresto y detención. La herramienta, lanzada por la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), se ofrece como una alternativa para que los migrantes puedan abandonar el país de manera voluntaria.

La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, destacó en un comunicado oficial que CBP Home da a los inmigrantes la oportunidad de irse por su cuenta y con la posibilidad de regresar legalmente en el futuro. “Si no lo hacen, los encontraremos, los deportaremos y nunca regresarán”, advirtió Noem, reiterando la postura estricta de la administración Trump respecto a la inmigración ilegal.

El anuncio de la nueva aplicación se enmarca en una serie de medidas que buscan presionar a los inmigrantes indocumentados para que abandonen el país. Entre ellas, destaca una nueva regulación que entrará en vigor el 11 de abril, que exigirá a los migrantes indocumentados registrarse ante el gobierno federal para evitar multas o penas de cárcel.

La aplicación CBP Home reemplaza a la CBP One, que fue lanzada durante la administración del presidente Joe Biden para facilitar que los migrantes en México pudieran agendar citas para solicitar el ingreso legal a Estados Unidos. A pesar de que más de un millón de migrantes utilizaron CBP One, los republicanos criticaron esta herramienta por facilitar la migración masiva y no garantizar un proceso de revisión adecuado.

Con el cierre de CBP One ordenado por Trump al asumir el cargo, la nueva aplicación CBP Home permitirá a los inmigrantes indocumentados declarar su intención de abandonar Estados Unidos voluntariamente, evitar arrestos y procesos judiciales que podrían resultar en una prohibición de entrada permanente y acceder a información sobre su estatus migratorio y opciones para regresar legalmente en el futuro.

A pesar de las críticas de organizaciones proinmigrantes, que señalan que la medida no toma en cuenta factores como el derecho de asilo o la reunificación familiar, el gobierno de Trump insiste en que esta opción de autodeportación es más benigna en comparación con las severas sanciones que enfrentan aquellos que no cumplen con la orden de salida.

“Es una opción que les damos para que salgan por su cuenta, de lo contrario, serán expulsados sin posibilidad de retorno”, concluyó Noem, reiterando el enfoque rígido de la administración hacia la inmigración ilegal.