Mark Carney será el próximo primer ministro de Canadá tras ganar el liderazgo del Partido Liberal

Mark Carney será el próximo primer ministro de Canadá tras ganar el liderazgo del Partido Liberal

Mark Carney se ha asegurado una victoria contundente en las votaciones por el liderazgo del Partido Liberal, convirtiéndose en el próximo primer ministro de Canadá y reemplazando a Justin Trudeau en el cargo.

Carney, economista de renombre, tiene un historial impresionante que incluye haber dirigido tanto el Banco de Canadá como el Banco de Inglaterra, dos de las instituciones financieras más influyentes a nivel mundial. Nacido el 16 de marzo de 1965 en Fort Smith, Territorios del Noreste, y criado en Edmonton, Alberta, Carney ha sido una figura clave en la gestión de crisis económicas a nivel global, destacando su labor en la crisis financiera de 2008.

Durante su carrera, Carney fue el primer no británico en asumir el liderazgo del Banco de Inglaterra, donde se mantuvo desde 2013 hasta 2020, después de haber sido gobernador del Banco de Canadá entre 2008 y 2013. En 2020, asumió el cargo de enviado especial de las Naciones Unidas para la acción climática y las finanzas. A lo largo de su carrera, también desempeñó roles ejecutivos en Goldman Sachs, destacándose en ciudades como Londres, Tokio, Nueva York y Toronto.

A pesar de no tener experiencia política directa, Carney ha logrado ganarse el apoyo de los miembros del Partido Liberal gracias a su experiencia económica y su capacidad para navegar en tiempos de incertidumbre. Con una formación académica sólida, Carney obtuvo su licenciatura en economía de la Universidad de Harvard y su maestría y doctorado en economía de la Universidad de Oxford.

A nivel personal, Carney está casado con Diana, una ciudadana británica, y tienen cuatro hijas. Carney también es conocido por haber jugado al hockey sobre hielo en sus años jóvenes, sirviendo como portero suplente en el equipo de Harvard.

Recientemente, los sondeos han mostrado una tendencia positiva para los Liberales, con el apoyo del 34% frente al 37% de los Conservadores. Esto sugiere que, a pesar de los retos iniciales, Carney podría mantenerse en el poder por un tiempo considerable.



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