El comisionado de la NFL, Roger Goodell, ha salido al paso de las acusaciones que señalan favoritismo hacia los Kansas City Chiefs en los arbitrajes de los partidos. Durante una conferencia de prensa previa al Super Bowl LIX, Goodell calificó como "ridículas" las teorías que sugieren que la liga trabaja en conjunto con los oficiales para beneficiar a los campeones defensores.
"Es una teoría ridícula para cualquiera que la tome en serio", afirmó Goodell. El comisionado atribuyó estas acusaciones a la pasión de los aficionados y a la influencia de las redes sociales, donde este tipo de teorías conspirativas suelen proliferar.
"Muchas de esas teorías son cosas que suceden en las redes sociales y adquieren nueva vida, pero los árbitros en la NFL tienen los más altos estándares, son excepcionales y lo otro es parte de la competitividad en el juego", explicó Goodell.
Estas declaraciones surgen en respuesta a las críticas de ex jugadores como Terrell Owens y Rob Gronkowski, quienes han expresado públicamente sus sospechas sobre un supuesto favoritismo hacia los Chiefs. Owens llegó a afirmar que "es evidente y flagrante" que los árbitros favorecen a Kansas City, mientras que Gronkowski coincidió en que los oficiales han sido "un poco indulgentes" con el equipo.
Goodell defendió la integridad de los árbitros de la NFL y destacó que los Chiefs han obtenido la mayoría de sus victorias esta temporada por márgenes muy ajustados, lo que desmiente cualquier idea de que el equipo haya sido beneficiado por decisiones arbitrales favorables.
"En esta campaña los Chiefs obtuvieron 11 de sus 15 triunfos con marcadores muy apretados", señaló el comisionado.
A pesar de las declaraciones de Goodell, es probable que la polémica en torno a este tema persista, especialmente en las redes sociales. Sin embargo, la NFL busca enviar un mensaje claro: los árbitros trabajan de manera imparcial y las acusaciones de favoritismo carecen de fundamento.
