Un incendio devastador arrasó la unidad de cuidados intensivos neonatales de un hospital en Jhansi, al norte de India, dejando un saldo de 10 recién nacidos fallecidos y 16 heridos. El siniestro ocurrió el viernes por la noche en el estado de Uttar Pradesh y afectó a 55 bebés que se encontraban bajo tratamiento.
Según el funcionario local Bimal Kumar Dubey, 45 bebés fueron rescatados y están recibiendo atención médica. Sin embargo, el acceso al área fue complicado debido a las intensas llamas y el humo. Los bomberos tardaron 30 minutos en evacuar a los bebés, luego de romper ventanas para ingresar al lugar.
Un aspecto que ha generado indignación entre las familias es que las alarmas contra incendios instaladas en la UCI no se activaron durante el siniestro. Testigos afirman que el personal del hospital reaccionó solo después de percibir humo y fuego, lo que retrasó la evacuación.
“Si la alarma de seguridad hubiera funcionado, podríamos haber actuado antes y salvado más vidas,” lamentó Naresh Kumar, quien perdió a su bebé en la tragedia.
Brajesh Pathak, viceprimer ministro de Uttar Pradesh, visitó el hospital el sábado para reunirse con las familias afectadas y prometió una investigación exhaustiva. “Identificaremos a los responsables de esta tragedia y tomaremos medidas estrictas. El gobierno está con las familias durante este difícil momento,” declaró Pathak.
Este incidente expone nuevamente las carencias en infraestructura y seguridad de los hospitales en India, donde las normas de construcción son frecuentemente ignoradas. En mayo pasado, un incendio similar en Nueva Delhi dejó seis recién nacidos muertos, mientras que en 2021, una tragedia en Maharashtra cobró la vida de 10 bebés.
Las familias exigen respuestas inmediatas y una mejora en los protocolos de seguridad hospitalaria para evitar que desastres como este sigan ocurriendo.