Las redes sociales han estado en ebullición en los últimos días debido a las declaraciones del peleador de artes marciales mixtas, Ronaldo Rodríguez, conocido como “Lazy Boy”. Rodríguez afirmó ser hijo del icónico boxeador mexicano Julio César Chávez, lo que inicialmente pareció un conflicto familiar, pero se resolvió de manera inesperadamente divertida.

La controversia comenzó después de la última pelea de Rodríguez, donde hizo una irónica referencia a Chávez, insinuando que el excampeón no lo había reconocido como su hijo. La situación rápidamente captó la atención del público, y los seguidores comenzaron a discutir las similitudes físicas entre ambos.

“Claro que sí, mírame la trompa. ¿Cómo no? Es mi papá, nada más que no me dieron el apellido Chávez. Chávez señor es mi papá, nomás que no me han dado el apellido,” comentó Rodríguez, generando aún más especulaciones.

Ante la avalancha de comentarios, Julio César Chávez respondió con humor, aclarando que las declaraciones de “Lazy Boy” habían sido malinterpretadas por los medios. El exboxeador afirmó que el peleador de UFC había utilizado el sarcasmo para expresar su admiración.

Lo que siguió sorprendió a muchos: ambos deportistas se reunieron y compartieron un divertido video en redes sociales en el que Chávez “reconoció” a Rodríguez como su “hijo perdido”. “Hola amigos, miren aquí estoy con mi hijo perdido. La verdad, tengo que reconocerlo,” bromeó el excampeón mundial entre risas.

Rodríguez, por su parte, respondió con un sencillo pero contundente “Si soy, ya vieron, si soy”, dejando claro que todo se trataba de una broma amistosa.

Este intercambio, aunque ficticio, ha generado gran alegría entre los aficionados de ambos deportistas. La espontaneidad y el buen humor con el que han manejado la situación subrayan que, más allá de las rivalidades en el deporte, los valores de familia y amistad son los que realmente importan.