El pasado viernes 6 de junio se reportaron operativos antinmigrantes realizados por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) y propiciadas por la política migratoria de Donald Trump en negocios de Los Ángeles, lo que provocó una serie de enfrentamientos.
El resultado, fueron al menos 45 personas detenidas sin órdenes judiciales, sin embargo, el Departamento de Seguridad sólo dio a conocer seis detenidos:
- José Cristóbal Hernández-Buitron, 43 años - Perú
- Chrissahdah Tooy, 48 años - Indonesia
- Jordan Mauricio Meza-Esquibel, 32 años - Honduras
- Francisco Sánchez-Arguello, 38 años - México
- Cuong Chanh Phan, 49 años - Vietnam
- Rolando Veneracion-Enriquez, 55 años- Filipinas
Tras los hechos, surgieron protestas protagonizadas por hispanos, los cuales repudiaban las políticas antimigratorias y demandaban derechos para los migrantes.
Las manifestaciones tomaron mayor relevancia, debido a la historia de migrantes en la ciudad de Los Ángeles, ya que en el 2024, los concejales, nombraron a dicha metrópoli como "ciudad santuario" para la migración, debido a que se prohibió que se utilicen recursos o personas para implementar leyes federales en materia migratoria.
Una multitud de casi 100 personas salió a protestar por los derechos de los migrantes en Manhattan, Nueva York, en donde agredieron, lanzaron objetos, bloquearon a los elementos de seguridad y cinco personas fueron detenidas.
Las redadas generaron enfrentamientos con activistas y residentes de Los Ángeles, quienes denunciaron un "ataque terrorista" contra trabajadores.
Mientras las manifestaciones continuaban, el gobernador de California aseguró que el gobierno federal enviaría elementos de la Guardia Nacional a la zona para intervenir y controlar la manifestación.
Al menos 2 mil efectivos de la Guardia Nacional de los Estados Unidos comenzaron a llegar a Los Ángeles en la madrugada y mañana del domingo 8 de junio.
Por tercer día consecutivo, activistas y personas migrantes continuaron sus protestas contra las redadas, obteniendo de los agentes federales represiones con gases lacrimógenos y granadas aturdidoras.
También, como parte de la manifestación, al menos 2 mil personas bloquearon la autopista 101, cerrando el tráfico, pero siendo rápidamente replegados por elementos de seguridad.
El presidente ordenó a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem; al secretario de Defensa, Pete Hegseth, y a la fiscal General, Pam Bondi a tomar las medidas necesarias para disipar los disturbios: "se restablecerá el orden, los inmigrantes indocumentados serán expulsados y Los Ángeles será libre".
Al menos 22 gobernadores demócratas condenaron la decisión del presidente Donald Trump de desplegar la Guardia Nacional en Los Ángeles. "La decisión del presidente Trump de desplegar la Guardia Nacional de California es un abuso de poder alarmante".
También, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum se pronunció al respecto, asegurando que con la violencia no se atiende el fenómeno migratorio.
Asimismo, la exvicepresidenta, Kamala Harris, calificó las acciones de Trump como una "escalada peligrosa", además de calificarla como "parte de la cruel y calculada agenda de la Administración Trump para sembrar el pánico y la división".