Salvador Landeros Ayala, director de la Agencia Espacial Mexicana (AEM), presentó su renuncia al cargo debido a la falta de apoyo y presupuesto por parte del gobierno federal. En una carta dirigida a la presidenta Claudia Sheinbaum, fechada el 24 de enero, Landeros manifestó su frustración ante la falta de importancia que se le ha dado al organismo.
“El motivo es que a la AEM no se le ha dado la importancia que merece ni presupuestal ni administrativamente, debiendo ser el organismo integrador y articulador de las actividades espaciales de México”, escribió en su carta de renuncia, cuya filtración en redes sociales fue confirmada por un empleado de la agencia.
Desde su fundación, la AEM ha enfrentado limitaciones presupuestales, pero la situación se ha agravado en los últimos años. Durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, el presupuesto de la agencia se redujo casi a la mitad, pasando de 125 millones de pesos en 2019 a 69 millones en 2023. Para 2024, el presupuesto aprobado fue de 72.9 millones, y para 2025 se prevé una nueva reducción a 69.9 millones de pesos.
Landeros también reveló que había expresado su preocupación al titular de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, quien le informó que la AEM podría desaparecer. “Considero desafortunado [el cierre de la AEM] por todo el trabajo que costó crearla”, afirmó en su carta.
La falta de apoyo a la AEM también se refleja en su escasa actividad pública. Su último comunicado de prensa data de diciembre de 2024, y su cuenta en X se ha limitado a compartir publicaciones de las conferencias matutinas de la presidenta.
Esto contrasta con el anuncio que Sheinbaum hizo en noviembre de 2024 sobre el lanzamiento del primer satélite 100% mexicano y la primera misión espacial desde América Latina, con la participación de Katya Echazarreta, la primera mexicana en viajar al espacio.
Sin embargo, la auditoría realizada en 2022 por la Auditoría Superior de la Federación advirtió que la AEM enfrenta una estructura normativa, programática y presupuestal limitada, lo que pone en riesgo su operatividad y el cumplimiento de sus objetivos.
Con la renuncia de Salvador Landeros Ayala, el futuro de la Agencia Espacial Mexicana queda en incertidumbre. Mientras tanto, México sigue rezagado en el desarrollo de una industria espacial propia, en un contexto donde otros países de América Latina han fortalecido sus programas en esta materia.
