Los Alegres del Barranco rompieron el silencio tras la polémica generada por la aparición de imágenes de Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, y Joaquín “El Chapo” Guzmán durante uno de sus conciertos mientras interpretaban el corrido “El del Palenque”. El incidente, que se volvió viral en redes sociales, derivó en consecuencias legales como la revocación de sus visas estadounidenses y un proceso penal en curso.
En una entrevista con el periodista Luis Chaparro para el canal “Pie de Nota”, los integrantes fundadores del grupo —Pavel, Armando, Carlos y Cristóbal— hablaron desde su residencia en Jalisco, asegurando que nunca aprobaron la proyección de dichas imágenes durante el evento.
“No estuvimos de acuerdo”, afirmó Pavel, vocalista de la agrupación, quien detalló que durante los ensayos advirtieron al productor sobre el uso de contenido visual sensible, pero que el montaje fue colocado sin su consentimiento. “Nosotros dijimos: ‘Oye, las imágenes están un poquito fuertes, ¿no?’ Lo comentamos, pero ya en el concierto, cuando nos dimos cuenta, ya estaba todo hecho”, relató.
El concierto en cuestión reunió a más de diez mil asistentes y fue, según la banda, uno de los más importantes de su carrera. Pavel incluso ironizó que, además de los líderes criminales, también se proyectaron imágenes de “la Gilbertona”, lo que, dijo, evidencia que el montaje carecía de coherencia y planificación por parte del grupo.
La agrupación rechazó tener vínculos con el crimen organizado y aclaró que no tenían conocimiento del reciente hallazgo del Rancho Izaguirre, presuntamente relacionado con el Cártel Jalisco Nueva Generación. “No sabíamos la magnitud de lo que estaba pasando. Si nos hubieran dicho que no cantáramos corridos, no lo hubiéramos hecho”, señalaron.
En cuanto a la canción “El del Palenque”, indicaron que fue registrada desde 2021 y ha sido interpretada en diversos foros sin incidentes previos. “Nadie nos ha explicado todavía dónde está la apología. La canción no invita a delinquir”, dijo Pavel.
Finalmente, Los Alegres del Barranco hicieron un llamado a respetar el género del corrido como una narrativa legítima de la realidad social. “No somos la raíz del problema. Si lo fuéramos, seríamos los primeros en dejar de cantar. Pero cantamos lo que vive el pueblo, lo que todos ven en las noticias”, concluyeron.
