En las últimas cuatro semanas, al menos 25 migrantes han perdido la vida en trágicas circunstancias mientras intentaban cruzar la frontera entre México y Estados Unidos, según informes de activistas y autoridades fronterizas este viernes.
Ciudad Juárez fue testigo recientemente de cinco muertes, incluyendo cuatro cuerpos encontrados en el desierto de El Paso, Texas, y uno más en un canal de la misma ciudad, reportaron organizaciones civiles locales.
Entre los fallecidos se encuentra un hombre que cayó del muro fronterizo en el lado estadounidense, al oeste de Ciudad Juárez, cuyo cuerpo fue recuperado la semana anterior por autoridades de ambos países. Además, en el desierto mexicano de Chihuahua se encontró el cadáver de otro migrante víctima del calor extremo.
Francisco González, director del albergue Vida y de la Red de Albergues Somos Uno por Juárez, atribuyó estas tragedias a las nuevas restricciones migratorias y al incremento en la vigilancia por parte de Estados Unidos. "Los cambios continuos en las leyes y la variabilidad en los puntos de retención obligan a las personas a buscar rutas más peligrosas para llegar", explicó.
Estos eventos coinciden con una disminución del 40% en los arrestos de migrantes en la frontera sur de Estados Unidos, según el Departamento de Seguridad Nacional, después de la firma de una orden ejecutiva por el presidente Joe Biden para restringir el asilo y acelerar las deportaciones.
Por su parte, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, informó una caída del 72% en los arrestos de migrantes gracias a la cooperación bilateral. Sin embargo, González advirtió que el aumento en la vigilancia aumenta la vulnerabilidad de los migrantes al exponerlos a climas extremos y a grupos delictivos en las nuevas rutas que buscan.
En septiembre pasado, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) designó la frontera entre México y Estados Unidos como "la ruta migratoria terrestre más peligrosa del mundo", con más de 686 migrantes fallecidos o desaparecidos en 2022.
Rosa Mani Arias, de la organización humanitaria Avara, lamentó la falta de acción frente a esta crisis: "Es desafortunado ver a tantas personas perder la vida en su desesperación por alcanzar sus sueños".
Arias hizo un llamado a las autoridades para que adviertan a los migrantes sobre los peligros del desierto y las rutas riesgosas. "No se trata de jugar con la suerte, sino de tomar con seriedad estos lugares donde muchas personas han perdido la vida", concluyó.
