Hoy jueves 25 de abril, Ariel Henry ha renunciado como primer ministro de Haití, abriendo la puerta a la creación de un nuevo gobierno en medio de la escalada de violencia protagonizada por pandillas en el país caribeño. La nación ha sido golpeada por una ola de crimen que ha cobrado la vida o dejado heridas a más de 2,500 personas entre enero y marzo.

Henry presentó su renuncia en una carta firmada en Los Ángeles, con fecha del 24 de abril, la cual fue publicada hoy jueves por su oficina. Esta decisión se produce en el mismo día en que un consejo encargado de elegir un nuevo primer ministro y gabinete para Haití estaba programado para tomar juramento.

El consejo, conformado por nueve miembros, siete de los cuales tienen derecho a voto, fue establecido más de un mes después de que los líderes caribeños anunciaron su creación en una reunión de emergencia para abordar la crisis haitiana. Henry había prometido renunciar una vez instalado el consejo y seleccionado un nuevo primer ministro.

Se espera que este consejo contribuya a establecer el programa para un nuevo gabinete, nombre una comisión electoral provisional como requisito previo a la realización de elecciones, y establezca un consejo nacional de seguridad.

La renuncia de Henry se produce en medio de una creciente violencia perpetrada por pandillas que han lanzado ataques coordinados en Puerto Príncipe y áreas circundantes. La comunidad internacional ha urgido al consejo a abordar la inseguridad generalizada en Haití, donde las pandillas ya controlaban el 80% de la capital incluso antes de los recientes ataques.