En diversas ocasiones y diferentes escenarios, la Sección 50 del SNTE le ha expresado al Gobierno del Estado, la falta de un pago pendiente de hasta 6.43% de ajuste salarial para sus compañeros jubilados, por la diferencia que resultó del incremento de 4.66% en base a la inflación del año 2023 y el aumento al personal activo que fue del 11.09%.
 
El antecedente de este ajuste encuentra sustento en la negociación del año 2001 donde la Sección 50 del SNTE, solicitó al Titular del Ejecutivo del Estado hacer extensivo a todos los jubilados de la Secc. 50 este beneficio y no solo a los 924 que promovieron amparo desde 1993 y cuya resolución les concedió incremento igual que a los docentes en activo.
 
Los diferenciales pagados a lo largo de los años entre la inflación y el incremento al personal activo no llegaban a los 3 puntos %, por lo que se pudieron alcanzar acuerdos con el ejecutivo estatal para que se cubrieran esas diferencias.
Sin embargo, en este 2024 derivado de la negociación del Sindicato Nacional con el Gobierno Federal, la diferencia entre la inflación y el incremento salarial a los docentes activos se eleva hasta en 6.43%, muy por arriba del histórico, lo que complica un acuerdo, sin embargo, la dirigencia de la Sección 50 ha manifestado su interés por que se resuelva en definitiva esta problemática.
 
Al interior del Comité Ejecutivo Seccional, se dicen conscientes de que la solución a esta problemática implica la suma de voluntades de varios actores políticos, con el único objetivo de transitar por la vía institucional y sin diatribas hacia una construcción de una solución que ofrezca certidumbre a este sector fundamental de compañeros miembros de la Organización.
 
Los jubilados de la Sección 50 son más de 11,000 agremiados, donde la mayoría permanece a la espera de una respuesta y propuesta de solución del Gobierno del Estado a través de la Organización Sindical.
 
Por su parte el Secretario General de la Sección 50 y su Comité Ejecutivo han establecido mesas de trabajo desde el mes de junio con el Gobierno Estatal y se dicen listos a celebrar los acuerdos y convenios necesarios que ofrezcan la solución de fondo a este conflicto
. Esta situación ya se vislumbra como una prueba de fuego para el Gobierno del Estado de Nuevo León que deberá tender urgentemente puentes de comunicación y políticos en todos los sentidos para garantizar que los docentes no desesperen y decidan tomar otras acciones.