En su tercer periodo como alcalde de Monterrey, el priista Adrián de la Garza Santos enfrenta las expectativas ciudadanas en temas críticos como la seguridad y la vialidad, mientras que el edil panista de San Nicolás, Daniel Carrillo Martínez, en su segundo mandato consecutivo, es evaluado por sus avances en seguridad, drenajes y flujo vial. 

De acuerdo con una encuesta local, el 39% de los habitantes de Monterrey considera que la seguridad es la mayor prioridad, debido a los niveles de violencia en la capital de Nuevo León. En respuesta, la administración de De la Garza ha tomado medidas para reforzar la vigilancia en las calles, continuando la experiencia del edil como ex titular de la Procuraduría de Justicia. Con un respaldo del 63% de la ciudadanía, De la Garza también enfrenta una demanda del 23% de los ciudadanos para resolver problemas de tráfico, que afecta al área metropolitana en su conjunto. Otras peticiones incluyen la reparación de baches (18%) y mejoras en el transporte público (11%).

Por su parte, en San Nicolás, el alcalde Daniel Carrillo ha obtenido una aprobación del 59% en medio de preocupaciones similares de seguridad, identificadas por el 40% de los ciudadanos como prioridad. Carrillo ha respondido con la creación de dos bases policiales estratégicas en el municipio, destinadas a reducir los tiempos de respuesta a menos de tres minutos. Además, los habitantes demandan mejoras en vialidades y drenajes, que concentran el 44% de las prioridades locales, incluyendo la reparación de 29 socavones que afectan la movilidad.

Ambos alcaldes cuentan con una aprobación mayoritaria y el respaldo de los ciudadanos para enfrentar estos retos, aunque también tienen la presión de un porcentaje significativo que muestra escepticismo. En Monterrey, el 29% de los encuestados duda que De la Garza logre cambios efectivos en su administración, mientras que en San Nicolás el mismo porcentaje de ciudadanos expresa preocupaciones similares sobre el desempeño futuro de Carrillo.