Durante un mitin en una fábrica de Mint Hill, Carolina del Norte, el expresidente de Estados Unidos y candidato republicano para las elecciones de 2024, Donald Trump, insinuó que Irán podría estar involucrado en los dos intentos de asesinato que ha sufrido en los últimos meses. Trump declaró: "Como saben, he sufrido dos intentos de asesinato, que sepamos. Puede que estén relacionados o no con Irán, pero es posible que sí".

El comentario de Trump se produce en un contexto en el que el FBI ha informado sobre ataques cibernéticos perpetrados por "hackers" iraníes dirigidos contra la campaña republicana. Sin embargo, la agencia no ha encontrado pruebas que vinculen a Irán con los intentos de magnicidio contra el expresidente.

Trump, conocido por criticar a la administración de Joe Biden, sugirió que la falta de evidencia concreta sobre la responsabilidad de Irán podría deberse a que el FBI aún no ha tenido acceso a los mensajes encriptados de los supuestos agresores. En sus declaraciones, el republicano afirmó que, de ser presidente, tomaría acciones drásticas: "Haría volar en pedazos a cualquier país que estuviera detrás de un intento de asesinato contra un candidato estadounidense. No habría más amenazas. Pero ahora mismo no tenemos ese tipo de liderazgo".

El expresidente también aprovechó la oportunidad para criticar la seguridad que rodea al presidente iraní, Masoud Pezeshkian, quien se encuentra en Estados Unidos para participar en la Asamblea General de la ONU, sugiriendo que su presencia aquí con "grandes fuerzas de seguridad protegiéndolo" es inaceptable.

Los intentos de asesinato de los que habla Trump incluyen un ataque el pasado 13 de julio, cuando un hombre disparó un rifle de asalto durante un mitin en Butler, Pennsylvania, hiriéndolo en la oreja. El agresor fue abatido por el Servicio Secreto, lo que llevó a la dimisión de Kimberly Cheatle, entonces directora del servicio, por los errores en la protección del exmandatario. Dos meses después, el 15 de septiembre, otro hombre armado fue arrestado cerca de un campo de golf en West Palm Beach, Florida, donde Trump se encontraba, encontrando las autoridades una carta que describía sus planes para asesinarlo.

Las declaraciones de Trump generan un nuevo debate sobre la seguridad y las amenazas que enfrenta un candidato presidencial, así como sobre las relaciones internacionales y el papel de Irán en la política estadounidense.